martes, 16 de noviembre de 2010
MIEDOS URBANOS
LUIS HERNAN PINEDA
Es uno de los vigilantes nuevos de la villa(8 meses en el sector, 15 en vigilancia) de aburra el cual accedió a responder algunas preguntas:
1.¿considera usted que los consumidores de drogas que se asercan al sector son peligrosos?
-no en realidad son inofencivos, no me resultan peligrosos igual yo ya estoy huntado de esto.
2.¿considera ud el sector tranquilo?
- si, en realida es tranquilo, pues cuenta con vigilantes que hacen de la zona residencial este mas ajena a los peligros.
3¿Qué problemas de orden publico ve usted en el sector?
-pues en ocasiones el el sector del morro se ven atracos y peleas, auque ya son reconocidos “están fichados” , los protagonistas de dichos asaltos.
4¿Qué reacción ve usted en los habitantes del sector frente a la problemática que se puede vivir aca?
-la gente siempre le gasta miedo a eso, evitan pasar por ahí, por miedo a que los atraquen o por simple fastidio de sentir el olor a marihuana o de ver a otros ihalar “perico”, igualmente se abstienen de llevar a sus hijos al parque infantil pues este sector tampoco se a salvado de la visita de estoas personas que podrían resultar desagradables.
CoNtRoVErSiA
La nueva villa de aburra también a sido punto de controversia a raíz de la "prohibición de manifestaciones obscenas" para lo cual la administración del conjunto,publico un cartel en el cual se veía ilustrado con una pareja besándose.
El consejo de administración aclaró que no se trata de prohibir los besos sino el desenfreno sexual, droga y utilización de las zonas comunes como sanitarios; pero el asunto permanece candente y provoca posiciones disímiles.
Los guardias de esta parte de la urbanización de 52 locales comerciales, 62 oficinas y 238 apartamentos (sectores A, B, C, D, E y F) ahuyentan a los que se posan al lado de los ventanales y pasan ronda continua por los jardines que, según algunos, han sido tomados como moteles improvisados.
Mientas cae la noche en el morro se ve como llegan mas y mas personas quien en medio de la marihuana y los “ploncitos” comparte mas que un rato agradable, se comparten vivencias, pensamientos y energias.
Pero esto no es ageno a quienes aquí viven mues muchos de los propietarios o arrendatarios alegan y expresan el miedo que sienten al pasar poir allí, pues se sienten acosados y ahogados por el vicio, ademas aseguran que la forma de vestir y de expresarse de los jóvenes que frecuentan el morro es parecida por no ser pretenciosos y decir que es igual a la que se maneja en los barrios bajos, aunque otros cuantos los encuentran inofencivos.
Un Sabado en La Villa
UN SABADO NORMAL EN LA VILLA DE ABUURA:
9:15 AM
En la plazoleta Cincuentenario, que es como el centro de la urbanización Nueva Villa de Aburrá, hay unas 200 personas,pero en el patio con forma de herradura, es tanto el espacio que los corrillos parecen islas.
Cualquiera podría estudiar las tendecias de la moda callejera con tan solo dr un vistazo rapido por la Villa, pues se ha convertido en sitio de referencia que atrae gente de todas las procedencias cardinales y sociales al igual que con infinidad de gustos y prefencias.
En frente del granero Los Tres se ve un grupo de adolescentes vestidos de negro, incluidas botas de caña media- y dos chicas de unos 13 años que sin necesidad de detenerse a mirarlas durante mucho tiempo es evidente que apenas hace pocos días frecuenta a dichos amigos, ”nueva en el mundo de los metaleros.”, pero al ver pasar por su lado dos metaleros rapados y con una especial forma de caminar que denota un mayor recorrido. Ni siquiera los miran, tal vez como muestra de que los consideran impostores.
Desperdigados, de a dos o tres, se aprecian 'emos', con sus camisetas ceñidas , el cabello liso tirado hacia un lado, converse y maquillaje negro que demuestra la realidad de su cultura.
Hoy se ven 'punkeros' de cresta y pantalones señidos, raperos con ropa ancha y gorras de vicera plana, jovenes con gorros de lana que cubren sus dreadlocks, peludos, calvos, niñas con faldas cortas, artesanos vendiendo baratijas, jóvenes alternativos con guitarra , uno que otro veterano untándose de juventud y grupos de parejas que en medio de miradas, besos y abarzos ven en la villa un lugar romantico para compartir.
De pronto alguien se levanta a aprovisionarse de cerveza, de otra clse de licor o gaseosa en la licorera La Villa o en los supermercados Los Tres, Seven y Don Pacho. Mientras tanto, en las mesas de Valhala, Lobotomía, Barrocko y Albenzu se pueden facilirmente percibir los aires de soledad, mientras otros disfrutas sentados en el suelo y las haceras del lugar, el cual a las 11:00 pm cierra su suelo a los visitantes quienes trsites o en medio de tragos y hasta drogas alucinógenas parten dejando allí todas sus vivencias.
Esta toma juvenil es parecida desde hace una década atras. Todo comenzó con el primer puesto de comida rápida que instaló Jaime Orrego a bordo de La 80 y que con el tiempo atrajo clientges por montón. La demanda obligo a la gente a montar otros carritos de perros y hamburguesas al igual de la facilidad de ir fueran abriendo bares, restaurantes y heladerías que pudieran abarcar todas las multiculturas que aquí se concentran.
Existe otro sector de la villa mas conocido como “el morro” en el cual es usual ver Otros huéspedes habituales, los que se visten de caballeros medievales para simular duelos por doncellas y reinos, quienes después de enfretar una batalla enfundaron sus espadas y se marcharon despues de ver sin asombro como uno a uno llegan hacia las 3:00 p.m. en los carros de sus padres y culminen entre 6:30 y 7:00 p.m.
Son unos 30 pero a su alrededor se aglomeran otros, quienes suelen asistir religiosamente a la demostración y empatan con un rato de cerveza con otros amigos.
También es normal ver jóvenes raperos improvisando sus rimas a sus amigos quienes los animan o hacen las beatbox y llevan el ritomo de notas que en ocasiones parecen no tenerlo.
Al igual que eelos llegan a el lugar personas de todas las clases sociales, de todos los niveles económicos culturales y sociales y la edad no parece ser tampoco un limitante a la hora de visitar este lugar el cual es un punto de encuentro para todos.
Que es la Nueva Villa de Aburra
El centro comercial de la Villa pertenece a la Urbanización Nueva Villa de Aburrá que está ubicada en la comuna dieciséis, Belén, al sudoeste de la ciudad; el origen del nombre se remonta a la fundación del “Poblado de San Lorenzo de Aburrá”, la que ocurrió en el año 1616. Este sector fue erigido el 22 de marzo de 1671 con el nombre de Nueva Villa del Valle de Aburrá de Nuestra Señora de la Candelaria, al cual posteriormente, se le dio el nombre de Villa de Medellín en noviembre de 1675.
La señora María Patricia González habita en la etapa tres desde el año 83. Ella cuenta que antes de construirse la urbanización estos lotes eran lagunas y potreros; sus habitantes llaman a la primera etapa la vieja villa y al centro comercial le dan el nombre de plazoleta o de herradura (por su forma).
Los locales se pensaron con el propósito de llenar las necesidades de los habitantes de los apartamentos y los moradores más cercanos. La idea de plaza estilo europeo, que se considera como un sitio vitalizador de actividades comerciales y espacio eminentemente de uso público, hoy es una luneta que cumple funciones sociales importantes.
La señora María Patricia González habita en la etapa tres desde el año 83. Ella cuenta que antes de construirse la urbanización estos lotes eran lagunas y potreros; sus habitantes llaman a la primera etapa la vieja villa y al centro comercial le dan el nombre de plazoleta o de herradura (por su forma).
Los locales se pensaron con el propósito de llenar las necesidades de los habitantes de los apartamentos y los moradores más cercanos. La idea de plaza estilo europeo, que se considera como un sitio vitalizador de actividades comerciales y espacio eminentemente de uso público, hoy es una luneta que cumple funciones sociales importantes.
Los primeros locales fueron almacenes de ropa y de comidas rápidas, hoy en día prevalecen algunos de estos, empero han incrementado la tabernas; el centro comercial se considera espacio público sin embargo posee vigilancia privada.
Existió un tiempo en que la Villa era solo un lugar para la cultura Rock; en la actualidad esta plazoleta durante la noche es un lugar de encuentro para muchos jóvenes que escuchan este tipo de música; no obstante, no son los únicos que se apropian de este territorio, aquí el espacio se pluraliza, es ocupado por jóvenes de subculturas y de diversas tendencias musicales, e incluso por personas de mayor o menor edad.
Por estas razones es importante observar cómo son las relaciones sociales en correspondencia con el lugar: una sola plazoleta llena de ideologías diferentes y de grupos que se comportan y se apropian de los espacios de manera disímil.
En las horas de la mañana parece ser una zona estática, la aparición de algunos transeúntes que se desplazan con agilidad refleja el diario panorama, cemento muerto y pocas relaciones de socialización primaria, no obstante al medio día suele tener más dinamismo, sin que un movimiento pasivo deje de acompaña el lugar.
Al caer la tarde la Villa se va llenando gradualmente hasta transformarse en un lugar de encuentro; amigos se reúnen, charlan, y hasta tocan guitarra; en algunos de estos encuentros y relaciones sociales predomina el consumo de licor, cigarrillo y de manera discreta, de sustancias psicoactivas.
En el transcurso de la noche se hace difuso identificar estilos, los metaleros se ubican a un lado de los alternos , los gronchos bromean cerca de los skate, diversidad de personas transitan, todo se hace confuso, el ambiente se torna nuboso para quien observa, muchas veces se ha escuchado decir que la Villa es un espacio propicio para la cultura rock, empero, ante este panorama se podría decir que es un escenario plural, expresado en la diversidad de subculturas, tribalismo urbano y relativismo cultural.
En el transcurso de la noche se hace difuso identificar estilos, los metaleros se ubican a un lado de los alternos , los gronchos bromean cerca de los skate, diversidad de personas transitan, todo se hace confuso, el ambiente se torna nuboso para quien observa, muchas veces se ha escuchado decir que la Villa es un espacio propicio para la cultura rock, empero, ante este panorama se podría decir que es un escenario plural, expresado en la diversidad de subculturas, tribalismo urbano y relativismo cultural.
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